Silenciosamente en el transcurrir de los días, frénico en muchas de sus horas, fue pasando octubre y al llegar las kalendas, todavía en la noche El blog de la British Library publicó las páginas del libro de Horas Houth correspondientes al mes de noviembre. Noviembre es similar a los otros mese en sus ilustraciones circulares, donde no podía faltar en el mes de San Martín, el cerdo. Como en tantos calendarios pintados y esculpidos durante la Edad Media, en noviembre hacen su aparición, en este libro de horas flamenco de finales del siglo XV, en medio del paisaje. Un hombre varea las bellotas rodeado de la piara en el folio verso y otro en el folio recto, lleva a dos animales bajo la tormenta. Sagitario que rige el último decano de noviembre está representado por el centauro arquero.
Hay cambios en este calendario del que tanto me interesan sus márgenes. Esta vez las páginas no son simétricas en su decoración. Sigue, en el folio 11 verso, con las florecillas azules de cuatro pétalos, pero alrededor del círculo, el taller de Simon Marmion ha pintado también iris, flor regia, y ranúnculos rojos. En el folio 12 recto, aparece una violeta. Salvo las florecillas azules no identificadas, ninguna de estas flores florece en noviembre. Pero la decoración foliar de alguna variedad de cardo, que en otros meses es representada seca, en el mes de noviembre es blanca. Centaurea cineraria, cuyo color blanco ceniciento es más acorde con un mes que comienza sus días recordando a los difuntos. El folio 12 recto encuadra la información del mes entre dos columnas doradas. Columnas góticas, que en su capitel repiten la decoración foliar de centaurea. Una cinta blanca rodea las columnas con las iniciales en azul M y Y en diferente caligrafía. El ignoto poseedor para el que se realizó este libro de horas, que probablemente nació un mes de noviembre.
Ya me he resignado a que el blog tenga como mucho dos entradas mensuales, y una al menos segura por la aparición del calendario. No faltan ideas, y aumentan los borradores en distintas fases. Las lecturas, los viajes como el de finales de octubre a las tierras del Véneto, los hacen surgir y esperar el momento en que se desarrollen y se publiquen. Pero el problema es el tiempo para dedicar al blog que casi no existe. Esta entrada tendría que haber aparecido ayer. Y para hoy, desde hace tiempo, estaba programada otra. Esa otra, que ha ido imposible dedicarle el tiempo necesario, puede que aún aparezca durante noviembre. Tampoco en un principio había ninguna canción o música preparada. Pero buscando entre los borradores había uno en que quería poner Wo die schönen Trompeten blasen, del ciclo de lieder Des Knaben Wunderhorn de Gustav Mahler. Alguna de sus canciones ya han ido apareciendo en otras entradas. El borrador trataba de un tema completamente distinto, pero para la fecha de hoy, para los días que serán cortos en luz e irán alargando la noche, parece más adecuada esta melancólica canción con el diálogo entre dos enamorados que ya no se pueden encontrar en esta vida. El muchacho no es consciente del todo que él ya ha muerto, que su hogar está en una pradera verde donde ha sucedido la batalla, lugar al que regresa, tras anunciarle a su amada que dentro de un año ella se reunirá con él.
La versión es una grabación legendaria, y una de las pocas que conozco que la canción es cantada por dos cantantes. En este caso son Elisabeth Schwarzkopf y Dietrich Fischer-Dieskau con la London Symphony Orchestra y George Szell. El disco se grabó entre el 8 y el 9 de marzo de 1968.
Gustav Mahler (1860 – 1911) – Wo die schönen Trompeten blasen (1888-1889)
Donde suenen las bellas trompetas, texto de Des Knaben Wunderhorn
Wer ist denn draußen und wer klopfet an, / ¿Quién está pues, afuera, y quién llama a la puerta,
Der mich so leise, so leise wecken kann? / que tan suavemente me despierta?
Das ist der Herzallerliebste dein, / ¡Soy el amadísimo de tu corazón,
Steh auf und laß mich zu dir ein! / levántate y déjame entrar contigo!
Was soll ich hier nun länger stehn? / ¿Por qué debo permanecer aquí más tiempo?
Ich seh die Morgenröt aufgehn, / Veo nacer la aurora,
Die Morgenröt, zwei helle Stern, / la aurora con dos luminosas estrellas,
Bei meinem Schatz, da wär ich gern, / con mi tesoro estaría yo mejor,
bei meiner Herzallerliebsten. / con la amadísima de mi corazón.
Das Mädchen stand auf und ließ ihn ein; / La muchacha se levantó y dejándole entrar
Sie heißt ihn auch willkommen sein. / le dio la bienvenida.
Willkommen, lieber Knabe mein, / ¡Bienvenido, muchacho querido!
So lang hast du gestanden! / ¡Cuánto tiempo has esperado!
Sie reicht ihm auch die schneeweiße Hand. / Le tendió la nívea mano,
Von ferne sang die Nachtigall / mientras a lo lejos cantaba el ruiseñor,
Das Mädchen fing zu weinen an. / la muchacha se echó a llorar.
Ach weine nicht, du Liebste mein, / ¡Ay, no llores, amada mía!
Aufs Jahr sollst du mein eigen sein. / De aquí a un año me pertenecerás.
Mein Eigen sollst du werden gewiß, / ¡Mía debes llegar a ser, ciertamente,
Wie’s keine sonst auf Erden ist. / como ninguna otra lo es en la tierra!
O Lieb auf grüner Erden. / ¡Oh, amor, en la tierra verde!
Ich zieh in Krieg auf grüner Heid, / Marcho a la guerra, a los verdes campos,
Die grüne Heide, die ist so weit. / los verdes campos que están tan lejos.
Wo dort die schönen Trompeten blasen, / ¡Donde suenen las bellas trompetas,
Da ist mein Haus, von grünem Rasen. / allí estará mi casa de césped verde!
Traducción: Kareol.
Ante diem quartum Nonas Novembres: Isia
Día de las Ánimas