Amis de la science et de la volupté

Jean-Jacques Bachelier, Gato de angora blanco c.1761. Versallesm Museo Lambinet

Jean-Jacques Bachelier, Gato de angora blanco mirando una mariposa c.1761. Versalles Museo Lambinet

Ante diem sextum Idus Iulias: Ludi Apollinares

Vous aimez les chats? Esta es la pregunta que me hizo hace dos noches un correo que recibí del Museo de Grand Palais de París. El correo llevaba un regalo, durante unas horas una aplicación para iPad, Les plus beux chats de l’Histoire de l’Art, sería gratuita. La aplicación consta de 100 obras de pintura, escultura y fotografía en que aparecen “nuestros amigos de cuatro patas” La aplicación tiene las imágenes a alta resolución, pero no se pueden descargar, aunque sí capturar. No es el primer regalo que recibo de este tipo de los museos franceses, ya podría tener el Museo del Prado un detalle parecido.

Gatos egipcios, gatos romanos, gatos al final de la Edad Media, gatos del Renacimiento, del Barroco y del Rococó. Gatos del Romanticismo y del Impresionismo, gatos japoneses y gatos de los  siglos XIX y XX. Gatos en la pintura religiosa y en la mitológica, gatos en el retrato y en la alegoría. Gatos en los stilleven, que aquí en verdad son bodegones y muertas naturalezas.

El animal ambiguo, el animal amado, pero también odiado y perseguido, el considerado taimado, infiel y ladrón. En varias de las obras no es una presencia amable sino inquietante y símbolo de algo malo u oscuro. Ha tenido en el arte más suerte el perro, que al menos en el mundo occidental no ha tenido las persecuciones que sufrió el gato considerado a veces encarnación del diablo, compañero de brujas, portador de mala suerte.

El perro lleva con los humanos desde finales del Paleolítico superior. El gato llegó algo más tarde en el Mesólitico y en los inicios del Neolítico con los primeros poblados y la vida sedentaria. Aunque parece más bien que el gato fue el que eligió vivir con los humanos y asociarse a ellos. Quizá pase por esta entrada alguno de mis lectores biólogos, matice lo que escribo ahora y corrija errores. El gato es quizá el felino más inteligente y desde luego el de mayor éxito evolutivo. Su relación peso-cerebro no debe diferir de la del león o el tigre. En algún momento, hace más de cinco mil años, con el neolítico ya perfectamente asentado el gato era un animal que ya vivía con los humanos. El gato vio que las moradas de los humanos no sólo eran lugares ideales de refugio caliente sino que en ellas abundaban los roedores que devoraban las cosechas y los alimentos almacenados. Eran unos magníficos cazadores de algo que era la pesadilla de los humanos. Gatos y humanos no se molestaban ni se interferían, es más, el gato era más manso, limpio, y menos peligroso por ejemplo que los hurones, que en la Antigua Grecia hacían la misma función y mordían y podían atacar y matar a los niños pequeños. El gato en todo caso se pondría en la cuna buscando el calor del bebé. Recuerdo una antigua historia leída hace tiempo ya no recuerdo en qué libro. Cuenta que en el siglo VIII a.C. en la época de las colonizaciones griegas, barcos de mercaderes griegos llegaron a Egipto y vieron los gatos en las casas. Los griegos intentaron comerciar con los egipcios, querían comprar gatos para llevarlos a Grecia para sustituir a los peligrosos hurones. Los egipcios se negaron dado que el gato era un animal divino. Los griegos no tuvieron ningún problema: robaron gatos egipcios. La historia no creo que sea cierta porque en Chipre hay restos de gatos domesticados desde hace más de 9.000 años.

Habitante de la casa, miembro de la familia desde la Antigüedad, sus penurias comenzaron en la Edad Media, que recordaba la divinidad que fue y que había que erradicar. El gato fue la encarnación del diablo, compañero de brujas en su vida nocturna. Perseguido, exterminado como causante de la peste, cuando podría haber ayudado a su control. Ejecutado y ahorcado. En el arte medieval trepa por las marginalia de los códices junto con híbridos grotescos. A partir del Renacimiento fue encontrando de nuevo su lugar en el arte. Siguió con su simbolismo ambiguo, a los pies de Eva simboliza el engaño y la astucia taimada, en las escenas de la Última Cena puede simbolizar la traición de Judas mientras el perro la fidelidad de los apóstoles. Pero el gato aparece en otras escenas religiosas, aparece en escenas mitológicas, y sobre todo en la pintura de género y en el retrato, sobre todo retratos femeninos y de niños; pero los hombres quieren ser retratados también con su amigo de cuatro patas.

Vous aimez les chats? Mais, oui.

A partir de estas imágenes de la aplicación del Grand Palais podrán salir bastantes escritos, ahora me limito a mostrar algunas de ellas y a dejar uno de los sonetos de Charles Baudelaire dedicado a los gatos. Hay que ser benévolo con mi traducción. Y una música, que por experiencia, también sé que les gusta, porque ellos aman la ciencia y el placer voluptuoso.

Charles Baudelaire – Soneto LXVI – Les Chats

Les amoureux fervents et les savants austères / Los amantes fervientes y los sabios austeros,
Aiment également, dans leur mûre saison, / aman por igual, en su edad madura,
Les chats puissants et doux, orgueil de la maison, / los gatos poderosos y suaves, orgullo de la casa,
Qui comme eux sont frileux et comme eux sédentaires. / frioleros como ellos y como ellos sedentarios.

Amis de la science et de la volupté, / Amigos de la ciencia y de la voluptuosidad,
Ils cherchent le silence et l’horreur des ténèbres; / buscan el silencio y el horror de las tinieblas;
L’Erèbe les eût pris pour ses coursiers funèbres, / Erebo los tomaría por sus corceles fúnebres,
S’ils pouvaient au servage incliner leur fierté. / si pudieran someter su fiereza a servidumbre.

Ils prennent en songeant les nobles attitudes / Adoptan mientras sueñan la noble actitud
Des grands sphinx allongés au fond des solitudes, / de grandes esfinges reclinadas en profunda soledad,
Qui semblent s’endormir dans un rêve sans fin; / que parecen dormir un sueño sin fin;

Leurs reins féconds sont pleins d’étincelles magiques /  Sus lomos fértiles están llenos de chispas mágicas,
Et des parcelles d’or, ainsi qu’un sable fin, / y partículas de oro, como una arena fina,
Etoilent vaguement leurs prunelles mystiques. /constelan vagamente sus místicas pupilas

Johann Sebastian Bach – Suite para Laúd en Sol menor BWW 995, Gavottes 1 & 2

Gatos en la Historia del Arte

 

Xelidoni & Anastasia

Amigas de la ciencia y del placer

 

45 pensamientos en “Amis de la science et de la volupté

  1. Me encanta esta entrada, y eso que yo soy más de perros…, pero es verdad, son tan misteriosos… y tan suyos.
    Pero una cosa, el gato que abre el artículo hace algo más que mirar la mariposa, la tenue elevación de su patita delantera y la delicada curvatura de su lomo delata que su pensamiento no es meramente contemplativo.
    Muchas gracias.

    • Gracias a ti y bienvenido. Espero aprender del arte oriental en tu blog.
      Para los que tenemos gatos sabemos que ese gesto y la patita levantada no son precisamente signos de contemplación, pero es que me he limitado a poner el título oficial del cuadro.

    • Gracias Pablo.
      Ha tenido mucho de improvisado y bastante de venganza: hacer algo que no tenga que ver con lo que me espera estos días ¿Sabes que dentro de 115 minutos comienzan mis exámenes de «septiembre en julio»? Ya te cuento por otro lado, que me tengo que ir ya al tajo.

  2. De parte de mi querida Nata, una gata romana que ha conquistado nuestra casa, gracias. Qui semblent s’endormir dans un rêve sans fin. Y pues la vida es sueño, me dejo cunar por esta música deliciosa y agradecerte el descubrimiento de esta nueva fuente para disfrutar, con gatos y arte. Ronroneo de gusto.

  3. Tuve una gata que nos acompañó catorce años. Nacida entre la hiedra de un viejo muro, tenía la belleza de una angora. Hija ilegítima de una gata sin blasones, enamoró a un conde. Bendito pecado de ojos verdes. Ahí nació Tomasina, para la delicia de un hogar.
    Los exámenes llevarán tu espléndido sello. Estoy segura.
    Un abrazo y hasta pronto.

    • Creo que los gatos no necesitan blasones, porque hasta hace poco todos son de raza, al menos en Europa. Es decir el llamado gato callejero, es el gato de raza europea. Y digo que hasta hace poco, porque la gente desaprensiva que ha comprado o le han regalado gatos de razas no europeas como siameses, angoras…, los ha abandonado en la calle y estos gatos se han mezclado con los europeos y ahora empiezan a verse gatos un poco extraños.
      Mi gata Anastasia, la blanca que esta en la parte inferior de la foto, y que es de tamaño mayor que la otra, en su cartilla sanitaria pone en raza «europea» pero el veterinario dijo que tenía algo de turca.
      Pero con blasones o sin ellos los gatos son como dice Baudelaire: orgueil de la maison.

  4. Hola Hesperetusa,
    tu entrada me ha recordado que tengo en el borrador de mi blog un artículo sobre los gatos egipcios y para complementar tu magnífico post de hoy lo publicaré la próxima semana en tu honor y en el de tu gato 😉 . Si me lo permites añadiré el punto histórico (egipcio) sobre estos mininos. Hay una leyenda que cuenta que en el año 525 a.C. los persas asedian la ciudad de Pelusio en el extremo nordeste del delta del Nilo. La victoria se veía imposible y el contraataque de los egipcios era inminente. Fue entonces cuando el rey Cambises II ordenó atar gatos en los escudos de los 600 soldados que habían sobrevivido en la batalla anterior. Los egipcios al ver a los felinos y por miedo a herirlos, se rindieron, cayendo la ciudad en manos del invasor. Esto probablemente no es más que una leyenda pero muestra la veneración que tenían los antiguos egipcios a los gatos, veneración que hizo embalsamarlos. En el delta del Nilo, en la antigua ciudad de Bubastis (Tell Basta), se hizo un hallazgo espectacular: en 1890 unas excavaciones desenterraron más de 300.000 momias de gatos. ¡Increíble!
    Un abrazo y una entrada muy minina.

    • Francisco Javier espero esa entrada gatuna la semana que viene. Por cierto, no es uno, sino dos. Son dos gatas 😀

      Curiosa la leyenda, o quizá no, que cuentas. No la conocía. Pero dice mucho como veían los pueblos vecinos y los imperios enemigos al Antiguo Egipto y su relación con los gatos. Como la historia que cuento yo de los griegos. Es más probable que el gato llegara a Europa occidental de mano de los fenicios, como llegó también la gallina y el olivo. Y creo que los fenicios no tendrían ningún remordimiento en robar gatos egipcios, criarlos y luego comerciar con ellos. Pero la veneración que se tenía al gato en Egipto pudo repercutir en la mala fama medieval, el recuerdo que había sido una divinidad pagana a la que había que combatir.

      Hay una historia real que cuenta Lawrence Durrell en uno de sus libros, Reflexiones sobre una Venus Marina, sobre la isla de Rodas, en 1946, no estoy segura, pero desde luego recién acabada la II Guerra Mundial. A las tropas inglesas y a los forasteros les llamaba la atención ver a los gatos atados, no estaban libres callejeando como es habitual. La razón era que durante los años de la guerra con la ocupación alemana, la población de Rodas pasó mucha hambre…, y se comieron a la mayoría de los gatos de la isla. Pasada la guerra, los gatos que quedaban eran tan valiosos para los que los poseían todavía que los ataban para que nadie los robara. Pero teniendo en cuenta la fecundidad de las gatas supongo que en pocos tiempo se debió solucionar el problema y los gatos de Rodas pudieron deambular en libertad.

  5. Mais oui¡¡¡ En mi hogar hay tres, a la última que llegó a la familia, Pomelina, le dediqué una entrada en el blog.
    Bello artículo sobre los bellos felinos.
    Un saludo desde Argentina.

  6. Lo has vuelto a conseguir, querida Hesperetusa, me ha entusiasmado esta entrada… tan tuya. Los versos de Baudelaire, la música de Bach, esas imágenes gatunas a través de los tiempos… Y me quedo meditando sobre ese terrible error histórico que supuso la matanza de gatos «satánicos», cuando eran ellos los que podían minimizar el número de ratas transmisoras de la peste negra… ¡Cuántas veces nos equivocamos! ¡Y cuánto tenemos que aprender todavía!

    • Cuanto me alegro que te haya gustado, querido amigo, porque ha sido una entrada bastante improvisada, que los blogs también tienen esto, tienes decenas de borradores en diversas fases y de pronto surge algo nuevo.
      La vida en aldeas y ciudades medievales podría haber sido mejor garcias al gato, pero el gato resultó un animal sospechoso. Y es que hay que tener buena conexión con ellos.

  7. Me gustan los gatos y la explicación con tantos detalles que das sobre ellos esestupenda. No tengo animales en casa, para tener un animalito en casa has de estar pendiente de sus cuidados de lo contrario no lo tengas, requieren atenciones y yo a veces no tengo tiempo o no puedo por otras circunstancias, si tuviese un animalito preferiría un perro de esos que hay tan chiquitos y preciosos. Es cierto que los gatos han tenido mala prensa, relacionados con la brujería, no lo creo, pero si he visto que a veces suelen ser ariscos y sacan las uñas incluso a sus cuidadores. Me gustaría ver todas las reproducciones que te han mandado, sin duda deben maravillosas. Magnífica entrada entrada, abrazos,

    • Hola Rosa.
      Sí, tener un animal implica hacerse cargo de él, la ventaja que yo le veo a un gato frente a un perro por pequeño que sea, es que el gato es más independiente y puede pasar más tiempo solo (las mías pasan una serie horas al día solas) y no es preciso que salga de casa al menos dos veces al día. Hay que mantener su arenero limpio y ellos se arreglan. Pero también es cierto que acusan la soledad y maúllan lastimeramente llamando, aunque lo hacen menos que los perros. No saltan ni mueven la cola cuanto te ven llegar sino que te esperan tras la puerta, arquean el lomo y levantan la cola. Es su manera de decir: que contento estoy de que hayas vuelto.

      La mala prensa de los gatos y la aversión que les tiene mucha gente no la comprendo (pero yo soy parte de la humanidad felinófila 😀 ) Los gatos ariscos en general es que han tenido malas experiencias con los humanos. O son gatos que ha vivido en la calle o asilvestrados. Mis tres ultimas gatas, una siamesa, que precedió a las dos de la foto ya no está conmigo sino enterrada bajo un olivo, han sido todas buenísimas de carácter, es cierto que con los extraños pueden ser tímidas y esconderse (la que está en la parte superior de la foto no)

      En cuanto a las imágenes del Grand Palais, con un poco de tiempo las capturaré todas (mi iPad tiene poca capacidad y tengo que hacerme con uno más grande) y haré una presentación, pero algunas de ellas tendrán entrada. De hecho hay una que ya tiene borrador desde hace bastante tiempo, pero no sé como iré de tiempo incluso en verano. Este verano lo tengo bastante secuestrado.

  8. Pingback: ¡Yo de mayor quiero ser un… gato egipcio! | Acuarela de palabras

  9. Lola para Hesperetusa: Ante todo ¡GRACIAS! Gracias por los gatos,por la música…Yo también amo los gatos. Aprendí de su independencia y su sedosa piel educó mi tacto de niña de familia humilde. He tenido la suerte de ver muchas de las obras que incluyes en el blog en los museos donde están expuestas(siempre me fijo en los gatos),hace más de cuarenta años que viajo; pero ahora ha sido un placer verlas juntas en casa,tranquila…afortunadamente hace años que no tengo que corregir exámenes…todo llega.Te envío energía para el esfuerzo final de julio que conozco bien. Seguiré el blog en verano,aunque no comente.Gracias de nuevo.

    • Gracias por tus palabras, Lola.
      La mayoría de las imágenes de la aplicación del Grand Palais están en museos franceses, que en distancia no es muy lejos, pero algunos están en museos de provincias, o museos poco conocidos, como el «retrato» del gato de angora que abre la entrada.
      Es una suerte iniciativas como esta, que no son nada caras, y que además tienen el detalle de regalarlas también. Es posible ver obras que de otro modo sería difícil ver. Yo también suelo fijarme en los gatos, mucho más escasos que los perros en el arte.

      En cuanto a los exámenes, al menos en unos dos meses y medio, con el nuevo curso ya en marcha, no tendré que corregir ninguno. Todo llega, las vacaciones también 🙂

  10. Je n’aime pas les chats, me j’aime bien ton histoire! magnífico artículo Hesperetusa, a pesar de que yo soy más de perro. Me ha encantado cómo has visitado la historia de los gatos desde sus orígenes domésticos, y de cómo se adaptaron al entorno humano. Insisto, no me gustan, pero algo deben tener para que los egipcios les hayan considerado casi sagrados, y que Baudelaire y C.S. Lewis les hubieran dedicado tantas líneas..Enhorabuena y gracias por el deleite.
    Un cordial saludo.

    • El mundo se divide entre felinófilos y… todos los demás. Algo especial tienen los gatos, pero estoy de acuerdo que no congenian con todo el mundo. Una asociación de hace 9000 años entre humanos y gatos tiene que haber tenido beneficios para ambos.

      Bienvenido, J.C. Barcala, y gracias por comentar.

  11. Hola C., me ha gustado mucho esta entrada que tan bien has acompañado con Bach. Muy bonitas las imagenes e interesantes los comentarios de tus seguidores. Estoy aprovechando el verano para ponerme al dia con tu blog. No olvido que me prometistes un articulo dedicado a las Vanitas….xD
    Espero que disfrutes de tus bien merecidas vacaciones por las tierras del norte.
    Un bs a tus niñas.
    A bientôt! (espero no haber metido la pata, mi frances esta requeoxidado ;D)

    • Hola Isabel.
      Las «niñas» se merecían estar en esta entrada, ya os conocéis personalmente 🙂
      Las vanitas se publicarán cuando el curso que viene vaya en marcha y la oscuridad del otoño se acentúe 😀 Es un borrador del que no paran de salir otros temas.
      Felices vacaciones para ti también, nos las merecemos 🙂

      Tu comentario se fue a spam. Es algo que ocurre con frecuencia, pero yo los rescato de allí siempre.

  12. Carmen,

    Disfruté mucho tu texto, el poema y la música, y además me alegró la noticia de la aplicación de Le Grand Palais, pues yo también soy amante de los gatos y, como tú, tengo dos gatas, una negra y otra parda.

    Hasta hoy no había visto esta publicación tuya, pero curiosamente, el 30 de julio, el blog en Tumblr de la Biblioteca del Smithsonian publicó tres entradas sobre los gatos; una de ellas recomendando el libro «Posters, a critical study of the development of poster design in continental Europe, England and America» de Charles Matlack Price, en donde existe una recopilación de carteles con mininos (http://smithsonianlibraries.tumblr.com/post/93344777235/cats-are-critical-to-posters-apparently-a); otra de las entradas hace referencia a una exposición que albergó en los años 40 «Nine Lives» y a los más de 100 objetos que la colección del Cooper Hewitt, Smithsonian Design Museum tiene en resguardo (http://smithsonianlibraries.tumblr.com/post/93316470661/the-cooper-union-museum-for-the-arts-of) tal vez ya conoces las notas y, por si no, dejo los links.

    Finalmente, y siguiendo las lecturas que hice a partir de esos blogs me gustaría dejar un granito de arena a tu información, si me permites; en Japón los gatos (neko) son símbolo de buena fortuna (Maneki Neko) igual que en Rusia de buena suerte, en tanto que en África fueron (¿o son?) una delicatessen… En fin, julio estuvo de gatos.

    Gracias por tu bello texto y mucha suerte.
    Gabriela Flores

    • Gracias por pasar por aquí y comentar Gabriela.
      Y gracias por los links. He estado una semana fuera y desde que he vuelto tengo problemas con la conexión a internet. Voy a explorarlos cuando tenga un rato de conexión constante.
      En cuanto a los gatos neko ¿son las gatas tricolores? Digo gatas porque la mayoría lo son. en uno d emis libros sobre gatos hablan de ellas y como las llevaban los pescadores japoneses en sus barcos como augurio de buena suerte y buena pesca.
      Los gatos seguirán apareciendo por este blog más adelante 🙂

  13. Carmen, Neko (猫) es la palabra japonesa para gato, cualquier gato, y la representación más popular es la de los Maneki que supongo son las gatas tricolores a las que te refieres, a mi, en lo personal, la que me parece más simpática es la que mueve su brazo, le llaman «jala dinero», me gusta pensar, mas bien, que nos saludan cuando llegamos a casa. 😉

    Saludos!

    • 😀 😀 😀
      El japonés no está entre mis habilidades, y no siempre tengo la costumbre de irme a Google si algún dato en mi memoria conecta. Y algo de razón tenía, el gato bobtail japonés, un gato de cola corta, es tricolor y considerado el gato que mas suerte da. En mi libro sobre gatos había una fotos de una de estas gatas en un barco de pesca, con el dato de que solían llevarlos los pescadores en sus barcas. El artículo no dice nada sobre el asunto que los gatos tricolores, que al menos en occidente siempre suelen ser gatas, porque los pocos machos que nacen con esa característica suelen ser estériles. En Japón la cosa cambia porque parece que los dos sexos están equiparados en color y sin problemas de fecundidad.

  14. Muy interesante! y agradecido, porque la mala fama del gato, todavía está presente, (que sí es individualista, quesi, quesi!, y los humanos, ¿no?.. Gracias! Me gustaría compartir este artículo, por facebook o por correo electrónico. Soy voluntaria de reiki para gatos, en una asociación de acogida de los mismos, y les encantaría!!!
    ¿Cómo puedo hacerlo?

    • Perdona, pero este comentario, y el último que se ha publicado, habían ido al spam, pero tampoco estaban en el momento que lo miré (siempre miro el spam porque pasan estas cosas)
      Como bien viste, en el comentario que sí se publicó sin problemas, están los botones-logos de compartir en Facebook y otras redes, así como también correo electrónico. En el caso de que no estén (hay muchas que no sé ni como funcionan ni las he visitado nunca), basta con copiar la dirección del navegador y ponerla en el sitio a publicar.

  15. Hola Hespertusa, creo que el comentario que te dejé no lo hize bien. Me ha encantado este artículo. Belleza, elegencia,historia, arte, música, bueno, qué decir, es tu línea. Soy voluntaria de reiki (masaje energético), para gatos en una asociación de recogida de los mismos. Voy a pasarles, con tu permiso, este hermoso artículo. Gracias, Hespertusa!

    • Gracias a ti, indeprofundis.
      El blog es público, asi que puedes pasar el artículo a quien quieras 🙂
      Lo que sí he quitado es la opción de «rebloguear» dentro de WP que es donde se puede. Pero es que llevo un tiempo viendo en el reader una serie de blogs que se mantienen y existen a base de publicar las publicaciones de otros. Uno de ellos, un auténtico blog-vampiro dejé de seguirlo (era de los que «pesca» seguidores: yo te sigo si tú me sigues) tras ver lo que hacía, hasta veinte publicaciones diarias…de otros. Pase que se haga una vez, hasta tiene más visibilidad tu publicación o al menos que se avise, pero mantenerse a costa del reblogueo no. Eso hace que quien sí rebloguearía con respeto se quede sin la oportinidad de hacerlo. Como he dicho en el otro comentario, lo que sí se pued ehacer es poner el enlace a la entrada copiando la dirección del navegador.

      En cuanto amis gatas, pues la que está en la parte de arriba de la foto fue «regalada» en un vivero de plantas al que yo iba a comprar, tendría unos tres meses, ella se me acercó y me eligió. La blanca que está debajo fue adoptada ya adulta, por internet, cuando sus dueños no podían hacerse cargo de ella. Aconsejo siempre acoger a un gato adulto que ya no puede estar en su casa. Son una delicia de cariño y agradecimiento, aparte de que te encuentras ya con un gato educado, estirilizado, etc. Y desde luego no comprar, ni tener un animal por un impulso repentino. En el momento que entra en tu casa son muchos años los que se van a vivir juntos.

  16. Se comenta que en la Edad Media se usó profusamente a la gineta en sustitución del gato, precisamente debido a esa persecución contra los felinos. En cualquier caso, tanto romanos como árabes la tuvieron como animal doméstico http://es.wikipedia.org/wiki/Genetta_genetta. Es una satisfacción y un privilegio enormes haber descubierto este blog donde se reverencia a la cultura con tanta elegancia. Gracias por seguir Ritual de las Palabras, un saludo.

    • No sabía que las jinetas se habían utilizado en lugar del gato. Por lo que he leido en el enlace su fución debía ser parecida a la de los hurones, y como ellos había que ir con cuidado, dice que son de mordisco fácil. No se lo limpias que serán, pero desde luego el gato resultó mejor animal para las funciones de depredador doméstico en todos los aspectos. Pero la persecución que sufrieron en la Edad Media como animal diabólico hizo que se buscaran sustitos poco recomendables.
      Gracias por tu comentario. Espero poder leer y comentar en tu blog si el tiempo me lo permite. Lo bueno de los premios y las cadenas (que detesto) es los blogs interesantes que se descubren.
      Saludos

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